Los Latinoamericanos son los primeros en haber desarrollado el concepto de Realismo Mágico y siguen siendo las voces principales en su discusión, el realismo mágico es una mercancía internacional, una distinción de nuestra América.
El realismo magico se encuentra especialmente vivo y goza de buena salud en contextos poscoloniales y ahora está recibiendo la extensión a nivel mundial.
El mismo no es hegemónico, es extravagante, excéntrico, corresponde a distinguir una zona del mundo y su maravilla.
Historia
El realismo mágico es un género literario de mediados del siglo XX y se define como el interés de mostrar lo irreal o extraño como algo cotidiano y común. No es una expresión literaria mágica, su finalidad no es suscitar emociones sino, más bien, expresarlas, y es, sobre todas las cosas, una actitud frente a la realidad.
El realismo mágico se desarrolló muy fuertemente en las décadas del '60 y '70, producto de las discrepancias entre dos visiones que en ese momento convivían en Hispanoamérica: la cultura de los colonos y la cultura de la superstición, del mito, de la magia, propia de Latinoamérica.
Gabo como le decían a García Márquez, incluso aquellos que no lo conocían, patentó (si es que no inventó) un estilo narrativo —el realismo mágico— que fue asociado no solo con la ficción latinoamericana sino también con la propia naturaleza de la región y confirmado a veces.
Ya siendo famoso, García Márquez le dijo a un escritor, luego de horas de hablar sobre todo, desde las telenovelas hasta las arepas: “Puedo sentarme todo el día a contar historias. El problema es que ellas quieren que las escriba”.
Características
- Contenido de elementos mágicos/fantásticos, percibidos por los personajes como parte de la "normalidad".
- Elementos mágicos tal vez intuitivos, pero (por lo general) nunca explicados.
- Presencia de lo sensorial como parte de la percepción de la realidad.
- Se puede apreciar en el contenido de la novela, representaciones de mitos y leyendas que por lo general son latinoamericanas.
- Contiene multiplicidad de narradores (combina primera, segunda y tercera persona), con el fin de darle distintos puntos de vista a una misma idea y mayor complejidad al texto.
- El tiempo es percibido como cíclico, no como lineal, según tradiciones disociadas de la racionalidad moderna.
- Se distorsiona el tiempo, para que el presente se repita o se parezca al pasado.
- Transformación de lo común y cotidiano en una vivencia que incluye experiencias "sobrenaturales" o "fantásticas".
- Preocupación estilística, partícipe de una visión "estética" de la vida que no excluye la experiencia de lo real.
- El fenómeno de la muerte es tomado en cuenta, es decir, los personajes pueden morir y luego volver a vivir.
- En términos de espacio la mayoría se ubica en los niveles más duros y crudos de la pobreza y marginalidad social, espacios donde la concepción mágica, mítica se hace presente.
- Se refiere a la novedad de los personajes irreales que siempre actúan sin actuar, es decir, que la copiosidad del personaje se ve reflejada en cada letra de la novela.
Personajes
Las propiedades que surgen de la realidad son: clarividencia, levitación, vidas largas al estilo bíblico, milagros, enfermedades mitad imaginarias que son exageradas hiperbólicamente; pero todo eso supone fe. Todo esto representa la parte mágica, mientras el realismo se encuentra en el modo de contar la narrativa: como si el hilo principal fuera realista y lo más importante, mientras que lo mágico no representa más que unos detalles ordinarios de poca importancia.
El realismo mágico invita al lector a menospreciar lo real, a apreciar lo milagroso y a despreciar lo histórico.