Cayó la flor al río - Estudio crítico sobre el Canto segundo del Libro primero: Tabaré o La leyenda blanca
Magdalena es una cautiva, un personaje infortunado que queda sola, viva, en la matanza y huida de los españoles cuando arribaron a nuestra salvaje playa en el Canto primero del Libro primero.
Desde ese momento el personaje va a deslumbrar con su blancura y se va a perder en el salvajismo del cacique Caracé, protagonista charrúa de la barbarie y hostilidad propia del salvaje que ha crecido bajo sus propias leyes y que ha sido alabado por su conducta temible.
El hecho de que Magdalena sea simbolizada a través de la flor, connota la idea de que su delicadeza y pureza están latentes y en peligro, ya que es una flor que no está en su tierra sino que, ha caído al río. Es probable que se marchite rápidamente, por estar desterrada, y por sufrir las vejaciones a su belleza que le profanará el cacique.
Es interesante observar cómo esta flor, este lirio pálido que es Magdalena, se vincula directamente con la flor que crece en las grietas del sepulcro, quien será su hijo. Tabaré es un lirio amarillento, producto del mestizaje, un personaje que crece en las grietas, en el dolor, que nace de la muerte. Este hecho es una metáfora, ya que Magdalena sigue con vida una vez que tiene a su hijo, pero sigue con vida física, su alma está muerta entre tanto dolor, anhelando el encuentro con un Dios cristiano que la salve de ese horror que está viviendo. Siempre llorar la vieron los charrúas, el dolor y la desesperación la pierden.
Estamos en condiciones de afirmar que Cayó la flor al río es el leit motiv de la obra, su presencia en esta tierra es la que desencadena todos los hechos de la historia, ya que esa flor desterrada es quien engendra al mestizo Tabaré, portador de las contradicciones propias de un héroe trágico.
Esta frase que podemos titular como leit motiv, aparece y reaparece en la obra, de forma estática y cambiante, con una intención evidente de construir significado. La imagen de esta flor se complementa a lo largo de la obra con la imagen del lirio amarillento, siendo este, su hijo.
La presencia española en la obra se construye a partir de las diferencias que tiene con la raza charrúa: a) color de piel b) creencias religiosas que devienen en una conducta civilizada. De esta forma Magdalena es un personaje que sufre, que deslumbra con su blancura y que todo el tiempo busca a Dios siempre mirar al cielo y más allá... Estos rasgos que marcan una distancia entre el charrúa original y el español, son los que va a heredar Tabaré: así se engendra el conflicto de la leyende, y del héroe.
El canto III inicia con el nacimiento de nuestro protagonista, Tabaré. Un niño llora, y su llegada al mundo es tan natural como la de cualquier niño, no obstante, se puede interpretar el énfasis en su llanto como una catáfora del sufrimiento que va a experimentar a lo largo de su existencia. El bosque, la naturaleza, es cómplice de su nacimiento, de hecho va a ser su refugio en un mundo donde no encuentra acogimiento.
Le llaman Tabaré. A) Nació una noche,
B) bajo el oscuro techo
en que el indio guardaba a la cautiva
C) a quien el niño exprime el blanco seno.
El nacimiento del personaje es clave. Lo primero que sabemos es que llora, lo segundo es su nombre. Este ya fue analizado y sabemos que significa o se interpreta como el que vive alejado, apartado del caserío. Su nombre determina su marginación por su falta de identidad concreta entre estos dos bandos.
A) Nace de noche, su vida está cargada de muerte, de misterio, de oscuridad.
B) Lo acoge en su nacimiento la noche, la naturaleza, una naturaleza que incluso puede ser cruel, porque es cómplice de Caracé, y también es testigo.
C) Este verso es clave, deja entrever que ese niño exprime la cultura europea, exprime la raza blanca. Hay una necesidad de civilizarse, de tomar del charrúa lo preciso y de tomar de su madre lo que lo salvará de ese salvajismo con el cual no se identifica.
Es interesante ver cómo Tabaré se describe a partir de distintas acciones que lo configuran como un niño que se gestó en el horror y nace buscando la salvación, la cual va a encontrar gracias al bautismo.
(...) Nació en el bosque
de Caracé el guerrero;
ha brotado, A) en las grietas del sepulcro,
un lirio amarillento.
Se menciona quién es su padre, estos dos versos confirman la quita de la honra de la mujer española con la consecuencia del embarazo, A) y plantean que Tabaré es un lirio amarillento, confirmando la metáfora aparecida anteriormente y completando, de a poco, el leit motiv. Su nacimiento fue un brote de lo imposible, un lirio en las grietas de un sepulcro, una flor amarillenta en los espacios vacíos de la muerte.
Es a través de estas figuras tan terribles que entendemos a la perfección el significado de Tabaré como ser humano conflictuado y producto del horror, sin embargo, transformado en un milagro que busca constantemente construir su identidad.
El amor que le profiere Magdalena es fuerte, es su refugio en el dolor, ahora al igual que la presencia divina. Mientras busca hacerlo dormir le susurra cánticos cristianos, lo cual habla claramente de la fusión de cuerpos, y de culturas.
- Los invito a reflexionar: ¿Es posible que Tabaré sea parte de la salvación que la española le pidió a Dios?
Prof. Emily Cabrera M